Hemos aceptado gustosamente participar de esta iniciativa de nuestros amigos los turroneros porque nos ha parecido muy interesante hacer una campaña, aprovechando el aniversario de cuidando.es, para unir esfuerzos en pro de hacer más visibles los cuidados enfermeros.
Pero como somos muy quisquillosos, vamos a dar un paso atrás y vamos a hacer autocrítica, básicamente porque somos más pragmáticos que dogmáticos (ya sabéis aquello de que somos talibanes enfermeros) y porque consideramos que lo que para hacer visibles los cuidados enfermeros, lo se debe hacer visible es la PROFESIÓN ENFERMERA en mayúsculas.
Y para eso, la que se tiene que dar un paso al frente es la enfermera del día a día de cualquiera de los diferentes niveles asistenciales y no asistenciales.
Porque, como dice este artículo del periódico El Mundo de hace unos meses, es hora de que se hable más de la enfermería.
Y lo hará mostrando a los demás que, a estas alturas de la historia, es una profesional universitaria que está formada, preparada, postformada, especializada, masterizada, doctorada, acreditada y todos los adas que nos inventemos.
Fundamentalmente porque somos una gran mayoría en el sistema sanitario, porque estamos más preparados que nunca y porque sabemos lo que queremos....
Pero...¿lo sabemos? ¿Lo sabemos todos... o solo somos unos pocos los que creemos saberlo?
Nuestra opinión es que todavia la masa crítica que debe impulsar el cambio es demasiado pequeña porque, aunque parezca sorprendente, siguen existiendo muchas enfermeras reacias a este cambio.
Esta masa crítica solo aumentará cuando esa enfermera del día a día salga de detras de la mesa que se situa al lado del médico, o de detrás de la batea donde lleva las cosas para darselas al medico, o detrás del carro de las historias que empuja para el médico, o deje de decirle al paciente que no puede decidir algo hasta que no se lo diga el medico, etc... Cuando desaparezca el tuteo en una dirección y el usteo en la contraria. Cuando esta enfermera no le rellene las recetas y no le haga las llamadas. Solo cuando el color con el que se pasan las constantes a la gráfica no sea lo más importante del turno, solo entonces los conceptos independencia, interdependencia y delegación tendrán sentido.
Claramente, lo vivido por la profesión en los últimos años no tiene vuelta atrás. ¿Pero cuanto tardará en consolidarse? Nuestra opinión es que no lo hará hasta que no desaparezcan los servilismos, las ayudantías o las subordinaciones subordinadas. Es decir, tendremos que hacer catarsis como recomienda el famoso informe de la Fundación Alternativas.
Esta masa crítica solo aumentará cuando esa enfermera del día a día salga de detras de la mesa que se situa al lado del médico, o de detrás de la batea donde lleva las cosas para darselas al medico, o detrás del carro de las historias que empuja para el médico, o deje de decirle al paciente que no puede decidir algo hasta que no se lo diga el medico, etc... Cuando desaparezca el tuteo en una dirección y el usteo en la contraria. Cuando esta enfermera no le rellene las recetas y no le haga las llamadas. Solo cuando el color con el que se pasan las constantes a la gráfica no sea lo más importante del turno, solo entonces los conceptos independencia, interdependencia y delegación tendrán sentido.
Claramente, lo vivido por la profesión en los últimos años no tiene vuelta atrás. ¿Pero cuanto tardará en consolidarse? Nuestra opinión es que no lo hará hasta que no desaparezcan los servilismos, las ayudantías o las subordinaciones subordinadas. Es decir, tendremos que hacer catarsis como recomienda el famoso informe de la Fundación Alternativas.
El día que la enfermera individual se considere, de verdad, parte fundamental de un sistema que, dada la evolución propia de sus clientes, no puede sobrevivir sin su intervención, ese día se harán visibles los Cuidados de Enfermería y con ellos los NANDA, los NICs y los NOCs, las EGC y las EPA.
Mucho nos queda por hacer y por evangelizar y, como en el dospuntocerismo, desde cuidando.es ya han empezado.
Mucho nos queda por hacer y por evangelizar y, como en el dospuntocerismo, desde cuidando.es ya han empezado.
Muchas gracias, muchas gracias por poner el deo en el ojo propio en lugar del ajeno, por indicar algunos de los anclajes donde se ha de apoyar nuestro camino venidero y por hacer visibles los Cuidados de Enfermería.
ResponderEliminarUn abrazo de Serafín y Antonio Jesús
-No me rellenes las recetas, puedo hacerlo yo.
ResponderEliminar-A mí no me importa, Doctor, así usted se lo va explicando al paciente y así ganamos tiempo.
(espero vuestra respuesta a esta común situación del día a día)
Un abrazo.
Estoy plenamente deacuerdo con vuestra opinión. Cada vez que una enfermera, permite que otro profesional, ponga en una hoja d etratameineto médico, dar cambios posturales, aspirar secreciones,etc; cada vez que un paciente le pregunte a su enfermera qué tension arterial tiene y "su enfermera" le responda cuando venga su médico,etc,etc. En cada intervención de ese tipo la enfermera se va haciendo más invisible. Tenemos que mirarnos al espejo y vernos como somos, las responsables de los cuidados d elos pacientes. Somos educadoras, gestionamos, investigamos, realizamos docencia y cuidamos del paciente y su familia. Nuestra actitud dentro del equipo debe ser colaborativa y nunca permitir el servilismo. Ya pasó a la historia el que una enfermera acompañe a un médico para apuntar lo que luego "le vamos a pedir" " tú es que lo haces muy bien" "reclamame la anlitica". No señores eso nos hace ser invisibles. Cuando en un pase de sal la enfermera aporte sus conocimientos sobre el paciente y lo ponga en común con su compañero médico y el le aporte los suyos a ella. Todos saldermos beneficiados, pero especialmente uno, el paciente. Hoy quiero aportar mi revindicación por una enfermera visible al lado del enfermo y familia y miembro d epleno de un equipo multidisciplinar donde todos aportemos nuestros conocimientos por el bien del paciente y nos dejemos de mirarnos el ombligo. Espero que dejemos de ser invisibles y que seamos capaces de ponerle al mundo entero las "gafas" que nos hagan tridimensionales. Felicidades a todas las que luchan por ser visibles y ánimo para las que se van difuminando en la pasividad de lo cotidiano.
ResponderEliminarEmilio, el contenido de la entrada es de autocritica. No pretendo hacer responsable a ningún colectivo salvo a nosotros mismos de nuestra invisibilidad.
ResponderEliminarEl ejemplo que planteas, del diario y reproducido en su tiempo por mi mismo, no significa más que trabajo colaborativo. El problema se plantea cuando la enfermera rellena la receta por servilismo o cuando la enfermera ni se plantea que no tienen porque rellenar la receta... es decir, que su trabajo es necesariamente secundario.
Independientemente de lo que planteo en la entrada, siempre que el trabajo en equipo lo requiera, y sabiendo que lo hago porque yo lo decido y no por delegacion/imposicion/autoridad no tendré problemas en hacer tareas delegadas (llamar por telefono, acercar una historia, buscar una analitica) y siempre que supongan una mejora en la atención que prestamos a "nuestro" paciente.