Estos días hemos estado en el 20º Congreso Nacional de Hospitales, un evento bianual en el que se juntan más de 2500 personas entre directivos, políticos, jefes, cargos intermedios, distribuidores, lobbies, industria y algún shufla 😁.
Aunque el congreso empezó esperanzador con una conferencia muy al estilo del conferenciante, el inigualable Julio Mayol (en esta noticia tienes un resumen de todo lo de dijo), en el fondo y solo con alguna excepción más que interesante, en términos generales hemos vuelto a oír las mismas cosas que ya escuchamos en el primero de éstos al que fuimos hace 4 años en Bilbao: profesionalizar la gestión, adaptar el sistema a la cronicidad, aumentar las competencias de las enfermeras, despolitizar la función directiva, abandonar el hospitalocentrismo o renovar a los directivos.
Un resumen de lo hablado lo puedes ver en esta publicación de Enfermera de Vocación.
En definitiva, muchos mensajes grandilocuentes que suenan muy bien pero que no terminan de convertirse en nada concreto. Aún así nos quedamos con esta frase de Joan Carles March entre las conclusiones.
Un resumen de lo hablado lo puedes ver en esta publicación de Enfermera de Vocación.
En definitiva, muchos mensajes grandilocuentes que suenan muy bien pero que no terminan de convertirse en nada concreto. Aún así nos quedamos con esta frase de Joan Carles March entre las conclusiones.
Entre la pléyade de gente enchaquetada y trajeada, hay un directivo distinto no solo por estética. Cualquiera que conozca a Miguel Ángel Mañez nota esa diferencia. Gran comunicador y bloguero sanitario indispensable (sus resúmenes semanales se leen más que algunos medios escritos) Manyez es un tipo singular, un tipo especial. Aunque nosotros somos amigos y no somos objetivos, no hay duda de que es un directivo diferente, posiblemente alguien en quién encontrar muchas de las cosas que se le suponen al nuevo modelo de directivo.
Pero cosas del destino, en el mismo congreso se hacía pública su destitución como director de RRHH del Hospital de Fuenlabrada, algo que algunos ya sabíamos.
Algo no va bien si el que consideramos el modelo a seguir no termina de cuajar.
Es muy posible que, como en la famosa novela de Michael Ende, los hombres grises no quieran que este Momo permanezca mucho tiempo en la dirección de un centro sanitario, vaya a ser que sus formas, sus ideas, sus inquietudes y su liderazgo sea mejores que los de ellos.
Afortunadamente, viendo la edad media de la mayoría de los asistentes, lo de la renovación de los directivos no es una frase hecha sino una realidad. Pronto harán falta nuevos directivos así que nuestro amigo no tendrá problemas para volver a demostrar que las cosas se pueden hacer de otro modo.
Esperemos que muchos de los que vendrán se parezcan a nuestro amigo Momo Manyez.
Yo no soy amigo de Miguel Ángel Mañez, así que soy más objetivo, y puedo corroborarlo, y ya me gustaría que aterrizara por estos lares...
ResponderEliminarYa estás tardando en conocerlo ;-))
EliminarSiguen los discursos, siguen los mismos diciendo las mismas cosas... Hace ya muchos años me di cuenta de que desde dentro del sistema no es posible el avance. Demasiados hombres grises.
ResponderEliminarLa evolución surgirá de donde menos se la espera.
Gracias por seguir manteniendo vivo este estupendo blog.
Yo no pierdo la esperanza Salva ;-)
EliminarGracias por comentar y por pasar a visitarnos de vez en cuando...